Sísifo se hace viejo

"El hombre solitario es una bestia o un dios" (Aristóteles).

[334] Miopía.


Llevo un par de días de la zeca a la Meca en despachos de los de vuelva usted mañana, mientras la solicitud para los cursos de formación pre-adoptiva duerme sobre mi escritorio esperando que me decida a atravesar la ciudad y presentarla. Algo ocurre para que nunca encuentre el momento para ese viaje, que en mi amada bici no ocuparía más de diez minutos y mil kilocalorías.

miopia

Y como siempre, ausentarme de mi casa me sirve para volver hecho una Magdalena. Es como si alguien me hiciera ver cosas que normalmente se ocultan a mis ojos, cosas que no veo porque estoy demasiado pendiente de otras más absorbentes.

Hace un par de días comencé con lúbrica intención una charla-por-chat con un infanzón, que de a poco fue convietiéndose en ganas de conocerlo. Cerramos la noche con una larga conversación acodados en la barra de un bar a la luz de unas cervezas; la mía sin alcohol, por supuesto. El antedicho infanzón es de una belleza extraña, lo que Adelasuma y yo llamamos un guapo-feo, de esos cuyo atractivo viene no se sabe de dónde, pero es enorme. Tal vez el añil de sus ojos tuviera algo que ver. Nos despedimos seguros de volver a vernos.

Ayer, sin saber muy bien cómo, acabé pasando la noche en Compostela, compartiendo estrechuras y mantas con un zagal mayor de edad pero menor de aspecto: nadie le echaría más de quince años. No más que un bozo dorado cubre su labio. Dos ojos asombrados, medio grises y medio verdes, alumbran su camino. Antes de dormir todo fueron besos, caricias, abrazos, besos, mordiscos, miradas, palabras dulces, besos, juegos, abrazos, caricias, besos y más besos. Después de dormir también. Luego me dijo que se pasó media noche despierto, mirándome dormir y, según él, oyéndome roncar. Hemos convenido vernos de nuevo mañana para ir al cine.

Sé que recibiré felicitaciones de otros cazadores. Sin embargo una muesca más en mi culata me deja pensativo. Este fin de semana me acompañó por Madrid el recomendabilísimo libro Summerhill, de A. S. Neill, donde hace pocos días pude leer lo siguiente: «Una joven pareja puede tener relaciones sexuales con gran placer aunque ninguno de los dos esté enamorado, pero si cada uno de ellos continúa buscando oportunidades ocasionales de tener relaciones sexuales, a su vida sexual le ha de faltar algo de valor, ya se llame a esto ternura o como se quiera. No existe un placer permanente en la promiscuidad«. Yo mismo habría puesto mi firma al pie, claro, y hace no más de un par de días escribí aquí algo que iba por este mismo camino. ¿Voy a tener que desdecirme sólo porque se me ha puesto a tiro un cervato? Me ha quedado la sensación de haberme adueñado de alguien por el gusto de hacerme dueño, no porque me resulte apetecible esa persona.

Y así me hallo, más turbado que antes de yacer con el tal zagal, sin saber de dónde sacar fuerzas para cumplir mi promesa de vernos mañana y sin excusas para no pasar con él una nueva noche. A veces parece que los dioses se burlan de nosotros. Recuerdo que el sábado a la noche le dije a Devaneos: ¿te das cuenta de que eres el único de los presentes que no está fornicando porque no quiere? Eso es miopía: hasta hoy no me he dado cuenta de que yo tampoco quería.

firma_sis

Christina Branco & Conjunto Iberico. Corpo iluminado.

De que túnel, de que árvore,
De que zero de remorso,
De que rasura do vento,
De que núpcias de mármore,
De que fresta, de que pórtico
Saíste neste momento?

Para que praia, que porto,
Que fugitiva garupa,
Que torre desconhecida,
Que mãos, que braços, que rosto,
Que tempestade difusa
Te encontras já de partida?

Não és de nenhum sossego,
Vives no gume do ser,
Na fronteira do devir.
E assim me tornas eu mesma,
Entre nascer e morrer,
Entre chegar e partir.

Filed under: dolor

9 Responses

  1. Miní dice:

    Me gusta todo lo que escribes. Enhorabuena.

  2. Antoniog dice:

    escribe con gusto, y le gusta provocar….la lagrima, la risa…hoy me quedo con la que merodea últimamente sus escritos, el zagal….. no tiene porque tener un mal fin, no se…quiza todo termine con una convidada o convidá, en estos tiempos que todo es invitar, nos quedamos sin la vida
    la otra parte, lo que comentas, la sexualidad no es mala ¿no? es algo innato, natural ¿no? que de dudas mantenemos con eso, sin duda debido a la cultura… que de malo tiene la fornicación, lo mano son duda no es ella, sino lo que comentas, hacerlo fuera de la intimidad, bien por narcisismo o por dependencia
    gracias por la convidá

  3. Canalla dice:

    vaya sisifo. entre preguntas te levantas y entre preguntas pareciese q te acostases. no te entiendo porq no kiero entenderte, porq inevirablemente te entiendo y no kiero. tu aces lo smismo. te entiendes y te niegas y nprefieres la turbacion a la aceptacion. y pasa el tiempo. asta q entenderte sea lo uniko posible, y no te turbe mas q la suave caricia del orin en lso muslos a media noxe

    amapolaaaaaaaaaaaaa

  4. Supermann dice:

    chicos, vuestro intercambio de comentarios (canalla y sisifo) me excita.

  5. Beauseant dice:

    a veces no, siempre. Los dioses siempre se ríen de nosotros. Alguien con su nombre lo sabe mejor que nadie

  6. Ariadna dice:

    Cuando estás con alguien, puede ocurrir que todo radique en:
    a) Estar a cuatro patitas (o a cinco): es decir, estar flipadisísisisisimo. Suele pasar que tienes dolor de estómago y no sabes por qué, pero coincide con pensar que el otro puede no estar flipado contigo.
    b) Estar a tres patitas: sueles pensar «bueno, estoy flipado, pero lo disimulo bien».
    c) Estar a dos patitas: cuando estais tomando algo por ahí, se te van lo ojos a ese de la mesa de enfrente (o más bien buscas desesperadamente a otro), que está para un revolcón.
    d) Estar a una patita: derrepente notas un bulto a tu lado y piensas…»quién es este pavo que me habla mietras tomo el café?» (lo de café es un decir).
    Simple, pero real.
    Se trata de asumirlo.
    No te culpabilices, pero se consciente de ello.
    La dependencia emocional es peor que la sinceridad.

  7. Groucho dice:

    Somos depredadores y si se pone a tiro un cervat@ lo cazamos y a la «despensa». Sin demasiadas vueltas al coco.
    Las muescas en la culata, todos los pistoleros marcamos el revolver.
    Disfruta el momento.
    Saludos…

  8. Maddriz dice:

    una día más disfrutando de tu lectura a la que me quedaría poco que añadir… de nuevo vez me hallo sin palabras. una aventura entre sábanas, un extracto de un texto que roza la perfección y para acabar una reflexión de lo que no es si no la vida misma… y comparto tus palabras los tengo al alcance de mis manos y otra vez hoy me llenan más las palabras…

  9. Luego me dijo que se pasó media noche despierto, mirándome dormir y, según él, oyéndome roncar.

    ¿Lo ves?
    ¡Roncas!

Replica a Antoniog Cancelar la respuesta